lunes, 12 de septiembre de 2011

Traspasando un nuevo umbral de la maternidad...

A veces la maternidad me desborda... o eso me parece...
Después de un fin de semana largo de 3 días y de tareas y placeres compartidos com mi querido Alejandro, he podido descansar, leer y meditar. He repuesto mi energía y me he preparado para cruzar un nuevo umbral.
Lo más enriquecedor ha sido iniciarme en la pedagogía de Rebeca Wild, con su libro "Libertad y límites Amor y respeto", decisión que tomé tras los días duros de la semana pasada; he comprendido sutilezas de la crianza en las que antes no había reparado, o no había meditado en profundidad. Esta santa mujer invita a la reflexión sobre la verdadera libertad y sobre la autonomía y respeto que les damos a nuestros hijos. Nos recuerda que apenas conocemos el significado de la libertad y que apenas intuimos la responsabilidad que conlleva.

Creo que en algún momento de la semana pasada Nur no se sintió amada, que sus necesidades de afecto no fueron cubiertas como ELLA las necesitaba, y que por mi parte no fueron respetadas sus decisiones en varias ocasiones. Y aunque me sentí muy mal conmigo misma por ello, he comprendido, y sobre todo, he cambiado el chip muy rápido (estas cosas no se pueden hacer esperar).

Esta experiencia ha reforzado mi creencia de que el AMOR es la fuerza más poderosa y sanadora del universo, un amor consciente, respetuoso, disponible... (¡aaaay! ¡cuánto tengo que aprender todavía!)
Esta lectura, el descanso, los cuidados de mi amado Alex y la sonrisa y la ternura de mi hija, me han hecho recuperar el sentido de la maternidad, y esta vez renovado y fortalecido. Yo lo he notado, y Nur también. No sólo ha recuperado el apetito, su cara, sus ojos y su alma vuelven a sonreir. Porque sabe que su mamá está ahí. Totalmente disponible. Acompañándola con respeto, amor y empatía, conteniendo ese espacio invisible que envuelve amorosamente a la pequeña gran maestra, acompañándola en el camino de descenso de los mundos celestes (sí, ayer empezó asomar un nuevo diente).

He tomado muchas más conciencia, con mucha claridad, de que la prioridad de un niño es el sentirse amado (sobre todas las cosas), con todo lo que supone: el ser abrazado y besado (cuando quiere, respetando sus límites), respeto a sus decisiones, el ser tenido en cuenta, el ser escuchado, en su llanto, en su risa, en su grito, en su felicidad, en su necesidad y en su alegría.
Esta consideración y esta empatía han de ser tomadas al pie de la letra por quienes hemos elgido criar y educar fuera de los antiguos paradigmas de autoridad y limites (entendidos como el establecimiento de unas normas que benefician "mi" estilo de vida, y no tanto las necesidades esenciales de mi hija o su espacio vital).
Nosotros también tenemos que encontrar una nueva manera de contener a nuestros hijos, de enseñarles a vivir en libertad, respetando la libertad de otros y asumiendo la responsabilidad que esto conlleva.

En fin, que me encanta el libro y resueno muchísimo con él, en lo profundo y en la piel... es coherente y profundo, y muy fácil de entender. Me ha hecho ver, con otras cosas que he vivido últimamente, que los padres podemos (no me gusta usar la palabra "debemos") implicarnos en la pedagogía de nuestros hijos desde muy pronto, para que cuando lleguen a la escuela ellos sepan respetar el espacio y la libertad de los demás)
Claro que también nosotros DEBEMOS ( y aquí la uso sin ningún reparo) RESPETAR A NUESTROS HIJOS... desde el principio. Desde las "mínimas" decisiones que toman desde que son bebés. Y esto es muy sutil. Y hay que estar muy atentos, y conscientes. Y desprendidos. Y generosos...
En fin, cambiamos de piel, cruzamos nuevos umbrales, Nur lo está notando... ¡y yo también!
¡Feliz!

8 comentarios:

Noraya dijo...

Con gran alegría, y al mismo tiempo que me ocurría todo este proceso, me he encontrado con otras mujeres maravillosas que TAMBIÉN leen o ha leido a Rebeca Wild... Cocolina, del blog "Buceando en mi", Patricia, de "Ojitos brillantes", Gabriela...

Además acaba de abrirse en madrid un nuevo proyecto educativo basado en las pedagogías Waldorf y Pestalozzi (Wild): NIDIA (www.nidiaasociacion.blogspot.com)

Bendiciones para todas y todos ellos!! Ojalá estas iniciativas crezcan y se reproduzcan, podemos cambiar el mundo! (o al menos, nuestro mundo ;)

Patricia dijo...

Guapa, a mí casi me gusta más el Educar para Ser. Aunque en el que lees se ve más claramente la diferencia entre respeto y límite con amor, todo un temazo!

Una madre Pikler dijo...

Hola! Chicas! Hace unos dias se me despertó el deseo por ese libro...alguien lo tiene en pdf o digital? es que por aca en buenos aires...no hay nada...

Noraya dijo...

No sé... pero seguro que lo puedes comprar por internet...
Patricia! :)
Cuando fui a comprar el libro buscaba "Educar para ser" y me encontré primero con este. El otro lo tengo para después... ambos me parecen geniales! :)

Abrazos!!

Anónimo dijo...

Tomo nota!! Creo que me va a ir bien leerlo ahora que vamos a ser 4 en la familia....

Un fuerte abrazo, Marga

Noraya dijo...

Hola Marga!
Creo que nos vendría bien leerlo a tod@s, tendría que ser obligatorio en bachillerato! :)
Un abrazo!!

Maria dijo...

Genial Noraya, me lo apunto! El otro día estuve en Nidia y me encantó... El de Educar para Ser, dónde lo has conseguido? En la casa del libro no lo tienen... Un beso!

Noraya dijo...

Hola María!
Creo que lo compré en Ecocentro, allí si no lo tienen te lo piden pero lo suelen tener... (fui otra vez con una amiga que también se lo compró ;)
El de "Libertad y límites, amor y respeto no es tan popular", pero lo considero IMPRESCINDIBLE... tenemos un gran trabajo con eso, de verdad...
Yo definitivamente voy a ir los martes a Nidia con Nur, ahora con este frío no hay niños enla calle ni en los columpios... como van a la guarde, los padres los van a buscar y a casa!

Por cierto guapa te he dado un prmio que ya tenías pero te lo he dado igual, porque Sí. ¿Vale?
Un besito enorme!!

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