martes, 16 de noviembre de 2010

De viaje con mi peque

El pasado fin de semana Nur y yo hemos estado en Cantabria, con motivo de un encuentro de sanadores del agua y sobretodo, de encontrarnos con mi amiga Mona y su hijo Lancelot, un angelote precioso veinte días mayor que Nur, que ya tiene 7 meses.
Como estábamos con más gente, y había actividades programadas en distintos horarios y lugares, casi siempre al aire libre, he aprendido mucho sobre los viajes con bebés.
El primer día yo quería que Nur no rompiera con su "rutina" diaria, y trataba de que durmiera y comiera regularmente, como lo suele hacer cuando estamos en casa. Sobre todo, tenía miedo de que al volver a casa todo fuera un caos. Pero claro, igual que yo estaba excitada y feliz con el encuentro y la novedad, también lo estaba ella. Así que me he dejado llevar por el flujo de lo que ha ido aconteciendo, y le abierto la puerta al "caos" por unos días. ¡Y no ha sido para tanto! Hemos podido maravillarnos juntas en el asombro de la Naturaleza salvaje, hemos reído, meditado, paseado, compartido rezos, lluvia y danzado al sonido del tambor chamánico, juntas, dos como Una.

He aprendido que, aunque suene obvio, igual que nosotros nos adaptamos a nuestra nueva situación de papás, Nur también tiene que adaptarse a los cambios y a los movimientos de los padres. Ella nos ha elegido como cuidadores, con toooodo lo que ello conlleva. Y como el universo es tan perfecto, finalmente todo encaja como un puzzle sideral. Ella come y duerme a demanda, y nosotros disfrutamos de los viajes, de la naturaleza, de las nuevas amistades y de los cambios. Como tiene que ser.

Y la llegada a casa ha sido muy dulce, como si nada hubiera pasado. Y creo que ha sido poruqe la experiencia ha sido rica para las dos, y ambas la hemos podido integrar fácilmente, y porque nos ha llenado de luz y de felicidad. Pronto tenemos otro viaje, un poco más largo, un poco más lejos. Estoy abierta a adentrarme en el caos, siempre con mi hija, siempre con Amor indescriptible...

lunes, 1 de noviembre de 2010

Baby Led Weaning!

Hace poco hemos estado con la pediatra de Nur. Nos ha dicho que la peque tiene una alimentación de lactante (poca cantidad de leche, cada tres horas), y que es normal en algunos bebés (Nur tiene 6 meses), que son más lactantes que otros (aunque la nuestra sea lactante de biberón). Yo no había visto esto en los niños que he tenido a mi alrededor hasta ahora, pero parece algo normal y Mónica nos dijo que podía estar así, sólo con leche y algo de cereales, hasta el año, que no nos preocupemos, que está bien nutrida (y sobre todo teniendo en cuenta que no para!). El único problema que yo le veo, es que todavía nos estamos despertando un par de veces cada noche para darle de comer a Nur, y esto nos altera bastante el sueño... ni Alejandro ni yo nos llegamos a acostumbrar.

Por otro lado, tengo que confesar que tras la visita a la pediatra me quedé muy aliviada. Personalmente, ahora veo muy difícil y forzado empezar a darle alimentos sólidos a Nur, sobre todo a modo de papillas y purés, con cucharita, marcando unos horarios diferentes a los que ella misma me marca... me siento muy insegura... ¿tendré paciencia suficiente? ¿podré gestionarme bien para darle las comidas? ¿le afectará a Nur mi inseguridad con respecto al tema en su forma de comer? Creo que no tuvieron paciencia suficiente conmigo, y siento que es una tarea pendiente que tengo con mi hija...

Hasta el momento, lo más interesante que he encontrado, gracias a Graciela, la comadrona que nos atendió en el parto, ha sido el Baby Led Weaning o alimentación autorregulada, aunque en español no tiene un nombre definido, pues es en Reino Unido donde más popular es.

Se trata de no darle papillas ni purés a los bebés, donde no saben lo que están comiendo, sino de empezar a darles trozos de comida para que ellos exploren con los alimentos. De esta manera, aprenden a comer jugando, reconocen los alimentos que se comen (los tocan, los manosean, los chupan... -también los tiran, jeje) y relacionan el acto de comer con algo creativo y divertido. Teniendo en cuenta lo activa que es Nur, quizás me resulte más fácil el cambio de este modo, ¿cierto?
Muchos padres les dan a sus hijos parte de los mismo que comen ellos, tanto verduras como pasta, fruta, etc. y los bebés disfrutan de la hora de la comida.
Voy a empezar a darle algo de manzana, pera, aguacate y calabacín (hervido). Por supuesto, quien se quiera aventurar con el Baby Led Weaning, ya puede ir comprando baberos, y asumir que el bebé muy probablemente tirará algunos alimentos, así que el "guarreo" ha de estar asumido.
Ha llegado el tiempo de los cambios, y aunque éstos siempre asustan un poco al principio siempre traen bendiciones escondidas. Y esta vez no va a ser menos.